La Comunidad de Nazaret organizó el encuentro de matrimonios jóvenes la pasada semana en Navas de Riofrío. La convocatoria fue un éxito: acudieron 16 matrimonios con muchos niños entre 12 y 0 años. Fueron, sobre todo, los matrimonios que se han incorporado hace relativamente poco a la Comunidad de Nazaret, entre 2019 y 2024, y era la primera vez que muchos de ellos tenían la oportunidad de conocerse.
Empezamos con una eucarístía en el jardín espectacular de la casa, concelebrada por José Luis Sánchez Girón y Sergio Gadea y animada por los matrimonios y algunos niños, que contó con el emocionante acompañamiento musical de voz y guitarra de Micaela. Compartimos después la comida que habíamos traído entre todos, riquísima y abundante (llevamos bebidas para un regimiento, pero eso es otro tema).
Y en la sobremesa, mientras los pequeños jugaban bajo la atenta mirada de las niñas más mayores, nos distribuimos en grupos para compartir impresiones sobre el tiempo transcurrido en Nazaret y sobre lo que esperamos de la Comunidad en el futuro.
Testimonios, oración y dinámicas
Fue muy bonito escuchar tantos testimonios sobre la amistad en el Señor, sobre caminos de oración, sobre la dinámica de los equipos, sobre lo que supone en la vida de cada uno dedicar un tiempo al mes a leer, orar sobre lo leído y compartirlo con personas que atraviesan por tu misma situación vital, sobre el agradecimiento a los consiliarios y a los matrimonios acompañantes.
La jornada terminó con una puesta en común de la que salieron compromisos para implicarse más en la vida de la Comunidad y de la parroquia, para pensar en un voluntario común, para apoyar los cursos de novios allá donde nos llamen, para organizar como Comunidad una Pascua de familias.
Ha sido, en definitiva, un encuentro muy alegre y festivo, una ocasión de conocernos mejor y estrechar lazos, pero también una oportunidad para reflexionar sobre qué significa pertenecer a la Comunidad de Nazaret, cómo nos situamos dentro de ella y cómo podemos contribuir a su misión.
